Los planes para construir resorts con casinos en Tailandia se han debatido durante años, y el jueves pasado hubo una confirmación final del gobierno de que no detendrán esta oportunidad económica, a pesar de algunas últimas formalidades pendientes. Según un medio local, el Viceministro de Finanzas tailandés, Julapun Amornvivat, afirmó que el plan avanza con casi el 80% de aprobación. Amornvivat forma parte de una coalición más amplia que respalda los resorts con casinos, considerándolos como una significativa oportunidad para promover a Tailandia como un destino turístico aún mejor, especialmente para los clientes adinerados asiáticos y occidentales.
Para asegurarse de que los resorts con casinos puedan avanzar, el gobierno aún está trabajando en un proyecto de ley para legalizar estos complejos de entretenimiento, el cual debería ser sometido a votación próximamente.
Actualmente, los funcionarios están ajustando los detalles finales de la propuesta y han presentado una versión revisada al gabinete para los partidos de la coalición, quienes podrán evaluar sus méritos y decidir si el borrador es la base para una buena ley.
Si todo transcurre según lo previsto, las empresas que buscan ingresar al país deberán cumplir una serie de criterios, ya que Tailandia está interesada solo en los promotores destacados que puedan permitirse el lujo de realizar resorts con casinos similares a los que se ven en Las Vegas, Macao y otros lugares. Una empresa que desee introducir un complejo de entretenimiento debe tener un capital de al menos 10 mil millones de baht y obtener una licencia del Comité de Política de Complejos de Entretenimiento.
Una vez obtenida la licencia, será emitida por un periodo de 30 años prorrogables hasta 10 años cada vez, con un costo de cada licencia de 5 mil millones de baht y una cuota anual de 1 mil millones de baht.
El gobierno no ha cambiado su postura respecto al juego local, imponiendo a los residentes del país una entrada de 5,000 baht al casino, señaló The Bangkok Post, citando fuentes con conocimiento de la ley. En última instancia, Tailandia espera crear una economía que atraiga a turistas extranjeros adinerados y impulse la economía.
Sin embargo, existen preocupaciones sobre los posibles costos sociales, con algunos analistas criticando a los casinos como no las inversiones que el país debería perseguir para fortalecer su economía y mercado laboral, sin mencionar los temores sobre el juego problemático.
Hasta el momento, la mayoría de estos temores han sido ignorados por el gobierno, que está enfocado en atraer capital y a extranjeros adinerados. Crédito de la imagen: Unsplash.com.