Kalshi ha tomado la delantera una vez más frente a sus oponentes, principalmente la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC), después de una reunión que buscaba detener la oferta del mercado de predicción política de la plataforma. La reunión se resolvió a favor de Kalshi, mientras el regulador preparaba una apelación.
Al final, Kalshi obtuvo el permiso para lanzar sus mercados de apuestas políticas, lo que hizo el jueves pasado, habiendo sido autorizado por el juez de distrito Jia Cobb en Washington DC, quien decidió el mismo día del lanzamiento. Kalshi sostiene que ofrece un tipo de mercado de predicción que no es juego de azar, pero la CFTC insiste en que estos contratos deben ser regulados bajo las leyes financieras. Respecto al caso, el cofundador de Kalshi, Tarek Mansour, agregó: «La comunidad de Kalshi acaba de hacer historia, y sé que esto apenas comienza. Ahora es finalmente el momento de permitir que estos mercados muestren al mundo cuán poderosos son al proporcionar señales en medio del ruido y darnos más certeza sobre lo que el futuro nos depara.» Hasta ahora, el juez Cobb no ha estado de acuerdo con este argumento. «Los contratos de Kalshi no implican actividades ilegales ni juegos de azar. Implican elecciones, que no son ninguna de las dos,» comentó en su opinión difundida el jueves pasado. La CFTC ha prometido responder buscando medidas adicionales contra la decisión. Sin embargo, Kalshi ha celebrado la oportunidad de desplegar la alfombra roja de las apuestas políticas ofreciendo un mercado en el que se puede apostar a qué partido ganará el Congreso en las elecciones de noviembre. Lo más importante es que esta es la primera vez que se autoriza a una plataforma de apuestas políticas para lanzar mercados de apuestas sobre política en cualquier jurisdicción de Estados Unidos. Hasta ahora, dichas plataformas han ocupado un espacio legal complicado. Polymarket, un rival extraterritorial, ha sido duramente criticado no solo por la CFTC sino también por Kalshi, que insistió ante el juez Cobb que si se concedía la apelación del regulador, tendría un «impacto devastador» en la canalización de personas hacia el alcance de empresas que no tienen sede en Estados Unidos. En su defensa, Kalshi ha utilizado un argumento bastante popular, que Polymarket de hecho comparte. Todas las empresas en este espacio afirman que los mercados de predicción sobre las elecciones que ofrecen son de interés público, ya que se comparten con investigadores y analistas, así como sociólogos y psefólogos, que pueden utilizar los datos agregados.
Sin embargo, la CFTC ha desestimado este argumento. De hecho, el regulador insiste en que las apuestas políticas, ya sean en forma de mercados de predicción o de cualquier otro tipo, siguen siendo una forma de juego, que socava el proceso electoral, que es sagrado en Estados Unidos, y comercializa las elecciones. La realidad es, argumenta la CFTC, que existe un incentivo de alrededor de 100 millones de dólares para que los actores malintencionados intenten influir en el resultado de una elección, dijo un abogado del regulador.
Lo que sucederá a continuación aún está por verse, pero lo más probable es que los estadounidenses puedan apostar en las elecciones de noviembre de cualquier manera.
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